El Huevo de la Serpiente

Por Mario Luis ALTUZAR SUÁREZ

Mostró el huevo de la serpiente. Allí, en Comisión Permanente del Congreso de la Unión, el perredista Pablo Gómez confirmó la estrategia de provocar la violencia en el sitio a la Ciudad de México. Retó al presidente Vicente Fox a ejercer su facultad jurídica de usar la fuerza pública en el desalojo de las huestes de Andrés Manuel López Obrador.

“Nosotros sabremos cómo defendernos”, advirtió el 2 de agosto, el coordinador de la fracción parlamentaria del PRD en la Cámara de Diputados y senador electo. Parecería, entonces, que están preparados para la violencia civil que requiere mucho dinero y, si están listos, cuando menos ya se apalabraron con los potenciales “inversionistas”.

Podría ser blof, empero, el mismo López Obrador dijo el mismo día en el Zócalo: “Teníamos preparadas otras acciones de la resistencia civil”, y sonrió malicioso al agregar: “pero vamos a dejarlos unos días”. Con su trayectoria hipeactiva, es difícil pensar que espere al 31 de agosto o el 6 de septiembre, fecha límite para el resolutivo del TRIFE.

Se pueden precipitar los tiempos. Alejandro Encinas Rodríguez, que acusa omisión constitucional en su investidura como Jefe de Gobierno del Distrito Federal, se muestra sumiso a los lineamientos de su caudillo y declara a la prensa que tiene pruebas de las presiones del centro del poder a los 7 magistrados del TRIFE, sin nombres ni pruebas.

Es decir, que mediante la estrategia de sembrar la “duda razonable” en la población, se anticipa una resolución del TRIFE contraria a las ambiciones del perredista para preparar el escenario de la violencia civil, anunciado desde el 30 de julio por su principal operador, Manuel Camacho Solís, el mismo que se proclamó ideólogo del salinismo.

Los preparativos para desacreditar a la autoridad electoral en su resolutivo “inapelable e inatacable”, se observan en el mismo proceso impugnativo con sospechosas deficiencias presentados por el equipo jurídico del señor López Obrador, compuesto por el los ex priístas salinistas, el tabasqueño Arturo Núñez y el zacateco Ricardo Monreal Ávila.

Con fecha 2 de agosto de 2006, el TRIFE envió un escrito a la Coalición ¿Por el Bien de Todos?, en donde le da 3 días para presentar los respectivos escritos de protesta en 15 casillas impugnadas en la elección presidencial en el Consejo Distrital 01 de Campeche. ¿Ausencia de escritos básicos por expertos electorales como el tabasqueño Núñez?

Es increíble pensar que el mismo señor López Obrador, con su experiencia de impugnador electoral en el proceso de Tabasco en 1994, incurra en “deficiencias” de mostrar públicamente supuestos videos que confirmarían el fraude electoral y que, en 6 de ellos, correspondientes a Guanajuato, fueron negados por la misma dirigencia estatal del PRD.

Visto así, se tendría la impresión de que el candidato presidencial perredista ha usado y abusado de los medios de comunicación para sembrar “dudas razonables” sin preocuparse de consolidar las pruebas y mucho menos complementar los escritos jurídicos indispensables, y por medio de la retórica, precipitar al país al sendero de la violencia.

Económicamente tienen fortaleza con los más de mil 200 millones de pesos gastados en la manifestación del 30 de julio, aunque surgen las interrogantes sobre quién o quienes pueden “invertir” millonarios recursos para los preparativos violentos disfrazados de resistencia civil pacífica, y sin conocer cuál es el interés real que se encuentra detrás del Caudillo.

Pablo Gómez lo confirma en su reto al presidente Vicente Fox y advertir: “Nosotros sabremos cómo defendernos”. Empero, ¿a quién se refiere con ese nosotros? Los legisladores y funcionarios estatales y capitalinos de primer nivel, gozan de fuero más no sus seguidores que todavía les quedan y están confiados en la honestidad de su lucha.

Podría pensarse, incluso, que la cúpula partidista como los ex priístas y ex gobernadores de Baja California Sur, Leonel Cota, y de Zacatecas, Ricardo Monreal, o el chofer Nico con legisladores y ex legisladores como Martí Batres, económicamente estarían preparados para huir de la violencia a la comodidad del exilio.

Seguramente a ese núcleo de “nosotros” se refiere el traidor de la Juventudes Comunistas en los 70, porque el resto de la población, difícilmente podemos disponer de recursos para el día siguiente y quedaríamos entrampados en el baño de sangre cuando se rompa el huevo y emerja la serpiente del México bronco. ¿Se podrá desactivar?

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