Arcano |
¿Quién
pompó? Por Mario Luis ALTUZAR
SUÁREZ A las mujeres y niños
asesinados en Qana, Líbano. “No soy un ambicioso vulgar”,
gritó el 30 de julio en el Zócalo del Distrito Federal, el tabasqueño
perredista Andrés Manuel López Obrador, al
reclamar el supuesto triunfo electoral. Y con base en las cifras
oficiales, definitivamente no es vulgar al movilizar a 2 millones 400 mil
personas que requiere un gasto mínimo de mil 200 millones de
pesos. Una información del meridiano
El Sol de México Mediodía señalaba que para mover a cada uno de los
convocados a las reuniones “informativas” del señor López Obrador,
requería de 500 pesos cuando menos, y las cifras de la Secretaría de
Seguridad Pública del gobierno capitalino perredista indicaban una concentración dominguera de
2.4 millones de personas que requieren un financiamiento por mil 200
millones de pesos. Si la dependencia a cargo de
Joel Ortega exageró las cifras, y se ajustan a los cálculos del presidente
del Colegio de Arquitectos de la Ciudad de México, Rogelio Hernández Olave, entrevistado en la víspera por El Universal, la
concentración tendría un máximo de 910 mil 768 personas en los 227,692
metros cuadrados, tomando el máximo de 4 por metro y el financiamiento
requerido sería por 455 millones 384 mil pesos. Movilizar a 2.4 millones (cómo
dice Ortega) ó cerca del millón (cómo calcula Hernández Olave), implica, en el primer caso, 48 mil camiones y
en el segundo, 18 mil 215 unidades, a un promedio (muy austero) de 20 mil
pesos por unidad, consumirían
los mil 200 millones de pesos en el primer caso, y de 364 millones 300 mil
pesos en el segundo. Con base en las cifras
oficiales, se requieren recursos adicionales para alimentos y el pago a
los “invitados”, que duplicaría la “inversión” y en el caso de las
estimaciones del Colegio de Arquitectos, los mil 200 millones de pesos
podrían ser suficientes. Debe recordarse que el 30 de
julio se realizó la tercera concentración denominada “Asamblea Nacional
Informativa” y que las dos anteriores también consumieron una cantidad de
dinero equivalente. Cifras millonarias que mueven a preguntar: ¿De dónde
se obtienen los recursos? Y la más importante: ¿Quién paga las
movilizaciones? La Coalición por el Bien de
Todos, integrada por el PRD, el PT y Convergencia, niega que sean
“acarreados”, pese a las denuncias públicas de los mecanismos muy al
estilo priísta para lograr las movilizaciones desde el 2004 en que se
victimizó al señor López Obrador por el Señor
Vicente Fox que impulsaba su
desafuero. En el supuesto de que no sean
acarreados, cada uno de los 2.4 millones de convocados debió destinar un
promedio de mil 200 pesos para el turismo político al Distrito Federal,
sin contar la erogación en “detallitos” del recuerdo para la familia, la
camiseta y gorro amarillos y sus propias pancartas. ¡Claro que pueden
tomarlo como sus vacaciones! Un total que representarían por
viaje, casi tres meses de la limosna recibida por los beneficiarios de la
tercera edad, madres solteras o estudiantes “becados”, dos salarios
mínimos de un obrero en el Distrito Federal, desembolsados a escasos días
de que enfrenten el gasto en uniformes, útiles escolares y cuotas ilegales
a las escuelas públicas. Hay otro escenario:
Funcionarios públicos perredistas “cooperaron
voluntariamente” con un promedio de 5 mil pesos por movilización, se
necesitarían las aportaciones de 240 mil burócratas con el anexo de
aceptar el término de “acarreados” a los turistas
políticos. Sin embargo, a todos los
contribuyentes también nos obligan a financiar la “defensa” del supuesto
triunfo electoral del señor López Obrador si se considera que se
destinaron cerca de 3 mil policías y agentes de tránsito al “cuidado del
orden” en la marcha, que a un promedio de salario mínimo representan 150
mil pesos, agua, energía eléctrica y sistemas visuales patrocinados por el
gobierno perredista del Distrito Federal, entre
otros. Los comerciantes que pagan
impuestos en el centro de la ciudad reportan, además, pérdidas por 100
millones de pesos en cada movilización, entre otras minucias que llevan al
señor López Obrador, a decir: “A quienes no piensan como
nosotros, les ofrezco una disculpa sincera por las molestias que pueda
ocasionar nuestro movimiento. Espero que algún día lleguen a
comprendernos, a entender que esta lucha es necesaria, no sólo para
nosotros, sino para todos; porque sólo con democracia viviremos en armonía
y México será un país respetable y respetado!. À | ||
|