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Arcano Político

Por Mario Luis ALTUZAR SUAREZ

 

Saqueo

Afloran los indicios de la infamia foxista. El engañoso manejo de las cifras de las finanzas públicas, son insuficientes para observar el saqueo de la nación. Una punta de la madeja que asomó en el proyecto de presupuesto federal para el próximo año. Con el sabor amargo de la impunidad de los responsables.

Se equivocó el presidente José López Portillo al anunciar en su último informe de 1982 que “no nos volverán a saquear”. El cuerno de la abundancia parece eterno. Bajo la óptica de que pasaron 4 administraciones con horneadas de nuevos ricos que gozan de cabal salud. La última, la del cambio fallido, superó los índices y el cinismo.

Un dato: El 9 de agosto de 2006 en San Luis Potosí, declaró el señor Vicente Fox que "afortunadamente, estamos viviendo un año  extraordinariamente bueno en materia de equilibrio fiscal, de  ingresos de petróleo y de honestidad, transparencia y eficacia” que permitió reducir de 70 mil a 40 mil millones la deuda externa.

El 9 de diciembre, 4 meses después, El Sol de México Mediodía publica de nota principal: “Investiguen la deuda de PEMEX” y de sumario: “Sospechoso, el aumento de la deuda de 15 mil millones de dólares a 90 mil millones (500% durante el foxiato; equivale a otro FOBAPROA: Walter Núñez del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM”.

En plena bonanza petrolera con precios del barril a más de 60 dólares, la deuda representa 75 mil millones de dólares, similar al rescate bancario de Ernesto Zedillo en 1997, mientras se canalizaron los ingresos a nuevos fideicomisos que, según la Contaduría Mayor de Hacienda de la Cámara de Diputados, están al margen de fiscalización.

El daño es mayor.Alk entregar el presupuesto federal a la Cámara de Diputados, la Secretaría de Hacienda emitió un comunicado de prensa que en la página 14 de 17, menciona en el saldo histórico de los “Requerimientos del Sector Público”, reducir en medio punto el 37.4% de la deuda con relación al Producto Interno Bruto (PIB).

Si el PIB se ubicó en 2005 en 175 mil 620 millones de dólares, el porcentaje representa 65 mil 682 millones de dólares, que implicaría una reducción de 11 mil millones de dólares a la deuda reconocida oficialmente por el señor Fox, y no los 30 mil millones anunciados.

La cifra es engañosa si se observa que se excluye la deuda pública en el sector paraestatal, los rescates bancarios, carretero y azucarero, entre otros y que dan credibilidad a los organismos internacionales que ubican a la deuda externa pública en 174 mil 300 millones de dólares en 2005, apenas 1 mil 320 millones menos que el PIB.

En diciembre de 2000, el Grupo Financiero Banamex reportó una deuda interna por 68 mil 166 millones de dólares y las cifras del Banco de México de noviembre de 2006 la estima en 233 mil 445 millones de dólares, un incremento del 242% incluyendo el FOBAPROA.

Una razón que arguyen los analistas financieros, es que el costo de la deuda externa representa cerca de 45 mil millones de dólares en intereses anuales, y que se cumplen los compromisos mediante nuevos créditos. Con base en el Banco Mundial, de 1986 a 2000 México recibió 140 mil millones de dólares en créditos y reembolsó 210 mil millones en intereses, es decir, 70 mil millones de dólares más de los que recibió.

Los datos de la Secretaría de Hacienda de Francisco Gil Díaz, indicaron que de enero de 2001 a septiembre de 2006, se transfirieron al exterior 70 mil 430 millones de dólares por concepto de intereses contra ingresos por 65 mil 809 millones de dólares de inversionistas, en donde se incluyen la venta de Banamex y Bancomer.

Si la inversión privada es insuficiente, existen dudas sobre el destino de los ingresos petroleros ubicados oficialmente en 18 mil millones de dólares, 20 mil millones de remesas de indocumentados. No cuadran las cifras. Los legisladores, entonces, deben investigar.

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Correo: :altuzar@arcanorevista.com

 

 

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