Precisiones

Por Mario Luis ALTUZAR SUAREZ

En la vorágine electoral parece perderse la conciencia de los electores para discernir sobre antecedentes y programas de los candidatos presidenciales que enfrentarán el desafío de reconstruir una nación acechada por la rapiña imperial y su esbirros preocupados por su preservar su impunidad del saqueo y devastación económica y social del país.

Un amigo, Gabriel del Río hijo, envía un correo electrónico, para incluirme como priísta y hacer un recuento de los daños que el PRI hizo a México, olvidándose que fui presidente fundador de la Corriente de Intelectuales, Académicos y Profesionistas del PRD en 1998, única vez que participé en un partido político y que me desilusionó.

En el programa Cartas Marcadas de la periodista Aurora Berdejo en Radio ABC, se hizo un ejercicio de auscultar el Tarot para conocer los arcanos de los candidatos presidenciales y se recibieron el jueves pasado, acusaciones de un supuesto priísmo de la comunicadora y sin razonamiento de por medio, advirtieron el triunfo del tabasqueño Andrés Manuel.

Al desconocer la identidad real de los radio escuchas molestos y con la experiencia de que existen operadores políticos entrenados para mantener la presencia de sus candidatos, podría explicarse el fanatismo dogmático que se sustenta en el sofisma de que los males de México son producto de 77 años de priísmo, válido solo para la guerra mediática.

Los jóvenes, tomando como referencia los 30 años como máximo, podrían desconocer las maquinaciones internacionales que se mostraban modestas en 1823 con James Monroe y su visión de una “América para los americanos” que el embajador mexicano Zozaya había advertido desde 1824 como el “creer que su capital, Washington, lo debe ser de América”.

Después del fracaso de la Internacionalización del Capital en 1955 y el desplazamiento del patrón oro por el dólar en las relaciones comerciales y financieras a partir de 1973, en 1990 podría parafrasearse al mismo embajador Zozaya: “Los americanos allende el Bravo creen que su capital lo debe ser de todo el mundo”.

Y en ese afán y la Internet como herramienta, se profundiza la desculturización mundial para crear el sofisma de que Washington es la capital imperial del mundo, en donde estorba la historia patria de las naciones y en el “modernismo” de desmitificar los símbolos nacionales para extirpar la propia identidad, edificar el Nuevo Orden Mundial Imperial.

En ese esquema se mueven historiadores que buscan destruir la imagen de Benito Juárez, sociólogos que impulsaron una Ley Mordaza como Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, o dogmáticos perredistas encubiertos de izquierdistas cuando la izquierda murió en 1970 en México.

Hay datos duros: Manuel Andrés (así consta en su acta de nacimiento), perdió la candidatura tricolor frente a Madrazo y se fue al PRD en donde concertacesionó con Ernesto Zedillo la gubernatura de Tabasco en 1994 y fracasó; enfrentó a su paisano Roberto Madrazo en las elecciones estatales de Michoacán y perdió.

Como Jefe de Gobierno del D. F., ignoró los problemas de agua de los empobrecidos iztapaltenses y las necesidades de transporte de los obreros y empleados sin construir un centímetro de Metro y ponderar el remodelamiento del privatizado Centro Histórico o construir segundos pisos viales que favorecieron a los pudientes de Santa Fe.

Los taxistas sufrieron el aumento de 225 pesos a 1,300 pesos el tarjeton y los cursos de 325 pesos a 1,500 pesos, los ambulantes de 200 pesos metro cuadrado de banqueta a 800 pesos, los contribuyentes descuidados en guardar las boletas prediales son sorprendidos con nuevos pagos cargados de intereses y los delincuentes son protegidos más que las víctimas.

Por si fuese poco, en la comida del miércoles pasado con el Club Primera Plana, el diputado perredista por Netzahualcoyotl, Benjamín González Bautista, aceptó que con las bases actuales del partido no se puede integrar un gabinete presidencial, estatal o municipal, por lo que se tiene que acudir a candidatos externos, principalmente para ganar votos.

Es decir, que los perredistas son la carne de cañón para que la alta dirigencia se entronice en el poder con cuadros externos, en una mala copia del señor Vicente Fox con su ingeniería financiera similar a la del crimen organizado para sostener su campaña y buscar entre sus amigos su gabinete, habilitados de último momento como panistas.

Una estrategia utilitaria que se rechazó en la imposición de Citlali Ibáñez como candidata a la gubernatura del Estado de México que fraccionó al partido en cuando menos tres vertientes y que provocará la desbandada en la nominación de candidatos a diputados y senadores que hacen dudar de las encuestas que muestran a López Obrador como cabeza en las preferencias electorales de 1,500 entrevistas por teléfono en el D. F.

Una realidad de nepotismo y corrupción que observé desde 1998 al fundar la Corriente de Académicos, Intelectuales y Profesionistas del PRD y que obligan a advertir sobre el falso mesianismo del déspota ilustrado que recibe el apoyo de Ernesto Zedillo, según Liévano Sáenz y negocia con el señor Vicente Fox la impunidad de su familia, como se demostró con el fallido intento de desafuero.

À